Abundando o como autoimaginarle jugando al autocricket, tannnn autoencantado de autohaberse autoconocido

En la mitología griega sísifo es el héroe absurdo. Condenado a un esfuerzo sin fin, aplica la fuerza de su espalda para hacer rodar la enorme roca pendiente arriba, en una tarea tan ardua como inútil, mil veces repetida.

Pablo es todo un "sísifo" voluntario de las bitácoras; bajo una imagen pretendidamente aséptica y académicamente encorbatada, vomita obviedades con la pasmosa facilidad de quien se cree un espíritu privilegiado bendecido por una sensibilidad que no nos asiste al resto de los mortales.

Un trabajo completamente inútil teniendo en cuenta que, ese resto de mortales, ni tan siquiera saben que este gran autogenio autocopiativo existe.

Pero como dicen que la navidad es mágica, también pablo ha tenido su "recompensa". (Y es que, en contra de lo que dicen por ahí, aporrear las puertas del "borjamari" puede acabar teniendo su "premio"... al menos en algunas ocasiones.)

La razón no puede ser más evidente, abundando nos ha emocionado post a post con el esnobismo cretino que usa para describir las maravillas del skipe, cuando se autocita para informarnos de una antológica "profecia autocumplida" (sic), y hasta, en un acto de filantropía sin precedentes y que a bien seguro ninguno le podremos agradecer nunca bastante, nos permite enterarnos de las cosas que le ha pedido él mismo, ¡no cualquiera, no, él mismo!, a los reyes.

Algo tan trascendental y fascinante para cualquier lector de blogs que a buen seguro colapsaría el servidor de la página el día de su publicación.

En determinadas ocasiones la lealtad a uno mismo puede nublar el entendimiento e incluso sesgar de manera sustancial la memoria, y es que la autosatisfacción, inevitable en todos los que escribimos bitácoras, puede degenerar fácilmente en actitudes de fidelidad tan extremas que conducen a situaciones ridículamente insostenibles

Y en los blogs la cantidad de expertos en llegar hasta este punto, (y abundando es sólo un ejemplo), parece no tener límites.


Calificación:

Borjamari | Otras opiniones | # | xml



Borjamari