Perdida entre libros: una devoradora de historias. Una amante de la palabras... Y se nota.

---

La primera novedad nos la ofrece el estilo. El estilo del creador literario refugiado en las bitácoras suele ser, por nuestras culpas, el de una carreta que fuera a barquinazos por una mala cuesta empedrada. Y este blog está escrito en un estilo muy personal, suave, sedeño, sentencioso, reposado, con una especie de grave ternura que le anda por dentro, que le enardece por dentro. Estilo con gran poder de síntesis: de vez en cuando concentra la autora en apretada fórmula un concepto que cubre su dilatada perspectiva personal. Pero ella misma conoce los escollos del procedimiento, y muchas veces sólo de modo tradicional se atreve a adelantar sus brillantes troquelaciones. La necesidad de condensación es su grave aprieto. Demasiado breve. Su única pega. A pesar de las dimensiones del espacio, éste le resulta un cajón estrecho. De todas formas, pocas cosas pueden adjetivar positivamente a un blog que sus entradas, por extensas que puedan ser, parezcan demasiado cortas. Y aquí ocurre.